SALVAR AL METEORITO CHACO DEL MARKETING Y ARTE ESCUALIDO

En septiembre 2012, en la ciudad de Kessel se llevara a cabo la ex posición ‘dDocumenta 13’. El segundo meteorito más grande del mundo va a ser trasladado como pieza central de una instalación artística. La Cámara de Diputado en una controvertida decisión aprobó el envió del meteorito ‘Chaco’ dejando perplejo a toda una provincia y principalmente a las comunidades aborígenes que centran sus creencia en esta pieza.  

Causa sorpresa que un meteorito real forme parte de una manipulación artística. Suena atractiva en cambio si la idea de conjunción entre arte y ciencia. El discurso de encuentro de la humanidad como argumento de los artistas Guillermo Faivovich y Nicolás Goldberg (F&G) ‘justifica’ la extracción del meteorito Chaco para ser trasladado a Alemania.

Es exótico que una instalación recurra a piezas preciosas (no me refiero a 'For the love of God' de Damien Hirts, una calabera cubierta en diamantes) pero también habla de la incapacidad de abstracción que tienen los artistas que tienen que recurrir al objeto real, y al hacerlo en este caso, actúan como en las exposiciones universales Europeas, durante el siglo 19 y principio del siglo 20, donde las colonias eran despojadas de sus reliquias para ser expuestas en los escenarios europeos, para deleite de las clases dominantes de explotadores.

La exposición ‘dDocumenta 13’ en la ciudad de Kassel de la Republica Federal de Alemania, va en ese sentido creo. A pesar de sus organizadores la ‘obra’ no ‘obra’ de F&G alimenta la idea de que los exploradores despojan a su ‘piacere’ de los objetos sagrados de los aborígenes para ser re ensamblados con sentido ‘superior’ en contextos mas ‘prestigiosos’ donde la asepsia de la instalación potencia todo el sentido universal que no poseía anteriormente… cuando estaba en su estado originario. Es esta artificialidad del rito de presentación en los altares europeos que 'exonera el meteorito de todo su pasado', lo redime en un sentido superior. Y es allí donde se dispara la omnipotencia de los políticos que pretenden que esa ‘luz redentora’ los alcance, los bañe con agua purificadora del reconocimiento eterno…

Es este motivo que los lleva a violar las leyes que ellos mismos escribieron y se pasan por el forro todo con tal de que la redención alcance sus costas, a costa del erario y patrimonio público. Todo en nombre de la promoción que 1 millón de personas asistentes a la exposición ganaría la provincia. Veremos que reacción tiene el honesto pueblo Alemán y sus organizaciones sociales cuando esta aberración colonizadora sea conocida. Sería un pésimo antecedente de marketing teniendo como herramienta un arte más que escuálido incapaz de generar abstracciones, que atentaría la poca calibrada idea de promoción de la provincia y los potenciales beneficios a futuro…


PD. Se esta articulando una campaña mundial para oponerse al traslado del meteorito.